1. Me encanta la caligrafía china (y por extensión, la japonesa). Me parece bellísima, muy estética, y muy espiritual.

    Por eso cabe puntualizar unas cosillas sobre esto, sin ánimo de ser purista, jeje.

    La primera es que, cuando los chinos (o los japoneses en “kanji”) nos ofrecen escribir nuestro nombre en su caligrafía, lo que en realidad están haciendo es transcribir su pronunciación, y en realidad no su pronunciación exacta, ya que hay muchos sonidos y combinaciones de sonidos nuestros que no se encuentran en su alfabeto (por ejemplo, en japonés Jose Luis sería “Hose Ruisu”).

    Otro detalle también es que frecuentemente una misma pronunciación admite distintos caracteres y distintas combinaciones. Por ejemplo, pongamos que en japonés “Hose” pudiera escribirse como un único carácter que se pronunciara “hose” o dos caracteres, uno “ho” y otro “se” (o incluso “hoo” y “hoose” con ‘o’ larga).

    Y no queda ahí la cosa, sino que también es posible que las pronunciaciones “hose”, “ho”, y “se” tengan más de un significado diferente (de la misma manera que nosotros tenemos “raya” de línea, y “raya” de animal marino), escribiéndose de distinta manera, ya que la escritura china y los kanjis japoneses (que es la misma, al fin y al cabo) no es fonética, sino ideográfica, así que en realidad a lo que corresponde el símbolo chino es a un concepto, no a una pronunciación.

    Con lo cual tenemos que, dentro del abanico de combinaciones de sílabas que representa la pronunciación de un nombre occidental, el artista oriental que nos lo caligrafíe lo que hará será elegir dentro de su conocimiento(algunos se llevan un diccionario encima) la combinación de caracteres que a él le parezca más bonita en ese momento, estéticamente, o conceptualmente.

    Con lo cual no es realmente nuestro nombre en chino, sino la interpretación estética que hace el artista sobre la pronunciación más cercana en su idioma de nuestro nombre.

    Así que esto, como manifestación artística tiene un gran valor, porque nos dice mucho de la visión estética del calígrafo, y también puede ser muy curioso y divertido si después nos dicen lo que significa cada uno de los caracteres que han elegido… pero en cambio no tendría significado espiritual para nosotros, no nos podríamos identificar con el dibujo del artista.

    Si de verdad queréis tener vuestro nombre en chino (o japonés) en un cuadro, como oro en paño, y que cada vez que lo miréis digáis: “ese soy yo, ME SIENTO yo”, lo que os recomiendo es que busquéis el significado de vuestro nombre y apellidos, lo condenséis todo en forma de frase o concepto (por ejemplo, mi nombre y apellidos serían: “Lanza brillante de los dioses en la ribera arbolada” o “lanza de los dioses brillando en la ribera arbolada” – oriental ¿eh? XD), y a la hora de hablar con el calígrafo, pedidle que os escriba esa frase, y que luego os diga lo que significan cada uno de los caracteres y su pronunciación en su idioma.

    De esta manera tendréis algo que no es sólo una expresión artística, sino que además será el concepto que simboliza vuestro nombre real, representado mediante la que posiblemente sea la ideografía más antigua del mundo de las que continúan en vigor actualmente.

    Entonces sí que tendréis un símbolo con el que os podréis identificar de verdad.

    Y después de meter este tremendo rollo le pido al webmaster que me deje meterlo como post en mi propio blog (joooooo, es que me ha quedado tan bieeeennn XD)

  2. Black Hole says:

    9,10. La verdad es que lo único que podría decir es lo de la aplicación web; para una traducción buena y no literal, deberás consultar a alguien que domine el idioma

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